Llegada al aeropuerto de Harstad/Evenes, donde el guía os estará esperando para trasladaros al hotel. En función de la hora de llegada del último integrante valoraremos la opción de hacer una pequeña ruta nocturna en raquetas por los alrededores para calentar motores e intentar visualizar las primeras auroras.

Comenzamos la aventura por las Islas Vesterålen; y en concreto, haciendo una visita al poblado Sami de Laila en la isla de Hinnøya, donde nos recibirán con los brazos abiertos y nos contarán la dura e impresionante historia de la cultura Sami, los únicos que tienen permitido criar y trabajar con renos. Por supuesto, tendremos la oportunidad de alimentar y conocer a algunos de sus mejores ejemplares, muy amigables si se les trata con respeto y cariño.

La jornada continua en dirección norte, hacia la isla de Andøya; y aquí en concreto nos dirigiremos hasta el pueblo de Andenes, donde se encuentra nuestro siguiente alojamiento, un precioso faro y un paseo costero con multitud de encuadres preciosos. Se trata de uno de los más antiguos y pintorescos pueblos de pescadores de las islas; y el punto más al norte de ambos archipiélagos.

De camino a Andenes pararemos también a conocer la bonita localidad de Bleik y su paradisíaca playa, por donde daremos un pequeño paseo y sacaremos algunas fotos. Es muy habitual encontrarse alces a lo largo de este trayecto por lo que mantendremos los ojos bien abiertos. Por último, esperamos que el cielo nos regale una ventana de buen tiempo para salir a la espera de auroras boreales; pues la localización de esta ciudad y el entorno que la rodea es única para su visualización.

En este día tenemos una de las actividades más bonitas del viaje, el avistamiento de ballenas. A primera hora deberemos acudir al museo de las ballenas, donde nos darán una completa descripción de los animales que vamos a poder observar durante el tour, así como una explicación de la zona donde habitan y como es su ciclo de vida. Posteriormente nos subiremos al barco y nos lanzaremos directamente a mar abierto. Durante los meses invernales la especie dominante son las ballenas jorobadas, aunque también se pueden encontrar cachalotes y orcas; así como una gran cantidad de aves y focas mientras estamos cerca de la costa. Es única la sensación de ver asomar las aletas del mayor mamífero de la Tierra mientras escuchamos sus cantos por el sonar y la costa se va perdiendo en el horizonte a medida que nos adentramos en los remotos mares árticos.

Una vez hayamos regresado del tour, descenderemos de nuevo hasta el poblado de Laila, donde cogeremos el puente que nos lleva a la siguiente isla. En función de las horas de luz que nos queden igual nos acercamos hasta el pueblo de Nyksund, un característico enclave de pescadores muy remoto que fue abandonado y ahora está recobrando vida poco a poco. Si no disponemos de tanto tiempo iremos hasta el pueblo de Straume y, por último, a Ringstad, donde haremos noche.

La jornada empieza con un safari en barco para poder ver y fotografiar en su estado más puro al águila de cola blanca; ave principal en estos archipiélagos. Podremos ver bien de cerca como cazan y organizan sus territorios a lo largo de las islas. Nuestro guía para la actividad será Ian, un experto fotógrafo y profesional en el mundo de las aves, que conoce como la palma de su mano toda esta zona y tiene localizados cada uno de los nidos y territorios; además, nos dará una clase magistral sobre cómo ha ido evolucionando la población noruega en esta zona tan remota a lo largo de la historia.

Es también día de cambio de archipiélago. Después del tour de águilas, descenderemos por las islas hasta el pueblo de Melbu, donde cogeremos el ferry que nos llevará hasta las islas Lofoten. El trayecto es corto, y nos dejará en el pueblo de Fiskebøl, que conecta con la carretera nacional E10. Haremos un par de paradas para fotografiar los primeros paisajes de Lofoten y enseguida estaremos cruzando el arco de bienvenida a Svolvær, la capital de estas islas. Un poco más adelante haremos una breve parada para fotografiar y conocer la historia de la catedral de Lofoten, el edificio de madera más grande del norte de Noruega. Finalmente llegaremos a Henningsvær, uno de los pueblos más bonitos que se conoce también como la Venecia noruega, pues el pueblo está construido sobre diferentes pequeñas islas unidas entre sí por puentes. El pueblo posee la mayor flota pesquera artesanal del mundo, el campo de fútbol más al norte y una gran cantidad de secaderos de bacalao.

Antes de comenzar nuestra ruta, aprovecharemos las primeras luces del día para hacer fotografía por el pueblo de Henningsvær y recorrer sus callejuelas.

Lofoten es considerado como el Caribe ártico por sus impresionantes playas de aguas turquesas. Esa aceptación no es solo válida para los meses de verano, pues en invierno se cubre de una magia completamente diferente. La nieve cubre por completo toda la arena a la que no llega el mar, dejándonos unos contrastes de colores que no podremos encontrar en ningún otro lugar del mundo. Pasear por esta maravilla de playas en invierno es una sensación totalmente única y un espectáculo digno de admirar. Visitaremos la playa de Unstad, playa surfista más al norte del mundo. Nuestra siguiente parada será la playa de Utakleiv, la más fotogénica de las islas y un enclave perfecto para admirar las auroras boreales. Hauklandstranda y Vik serán nuestras dos últimas paradas, pero no por ello las peores. Sus enclaves son espectaculares y nos harán descargar las cámaras y llenar las memorias con todas las fotos que vamos a sacar.

Tras recorrer la zona de playas, visitaremos el pueblo de Nusfjord, famoso por ser el más antiguo de las islas y encontrarse perfectamente restaurado. Constituido completamente por rorbuer, custodia la entrada a su fiordo y sus casas se encuentras completamente suspendidas sobre el mar. Una vez hayamos visitado el pueblo y sacado todas las fotos necesarias, continuaremos el camino hasta Reine, el lugar más famoso, bonito y fotogénico de todas las islas, donde pasaremos las 2 siguientes noches.

En el día de hoy nos desplazaremos hasta el punto permitido más septentrional de las islas; y desde ahí iremos parando en sucesivos puntos estratégicos para fotografiar los paisajes y pueblos más espectaculares.

Este punto más septentrional es el pueblo que posee el nombre más pequeño del mundo, Å. Se trata de un pueblo de pescadores único que nos hará comprender la dureza de vivir en estas latitudes durante los meses invernales. Una vez terminada la ruta fotográfica por el pueblo nos acercaremos hasta el bonito lago de Ågvatnet, uno de los sitios favoritos del rey de Noruega, donde podremos ver las pequeñas placas de hielo que se van formando debido a los ciclos de congelación y descongelación tan característicos de estas islas. Si tenemos suerte, el lago estará completamente congelado y podremos desplazarnos hasta su interior sin riesgo alguno.

Proseguimos la ruta visitando los pueblos más fotografiados de las islas, como los pueblos de Moskenes, Reine y Hamnøy; e intentaremos acercarnos también hasta unas bonitas cascadas y fiordos rodeados de afiladas cumbres. Aquí podremos tomarnos todo el tiempo que necesitemos para sacar fotografías del atardecer y disfrutar de las estampas invernales. Con suerte, los secaderos de bacalao estarán ya en su apogeo y podremos y podremos vivir de cerca la cultura pesquera de Lofoten.

En caso de alerta de aurora, a la noche nos acercaremos hasta la playa de Skagsanden, famosa a nivel fotográfico por las composiciones que podemos hacer con la montaña que tiene delante, y por su orientación norte, perfecta para visualizar auroras.

Comenzamos la ruta de regreso hasta Evenes, y aprovecharemos para ir parando en todos aquellos sitios que consideremos idílicos para sacar nuestras últimas fotos. Aprovecharemos también para acercarnos a algunos puntos estratégicos que no hayamos podido visitar durante el viaje de ida.

Pero no solo haremos fotos, pues una de nuestras paradas será para visitar el museo vikingo de Borg. Se trata del museo vikingo más grande de Europa, donde aprenderemos de primera mano un poco de la historia vikinga; una fascinante cultura que aun hoy en día mantiene muchos secretos por descubrir.

Una vez estemos en Evenes, disfrutaremos de una buena cena de despedida y, si hay posibilidad de ver auroras por última vez, nos desplazaremos hasta el pueblo de Harstad o a un buen mirador cerca del hotel; aunque desde la misma terraza del hotel se pueden ver sin problema si la gente lo prefiere.

Es hora de poner fin a este bonito viaje. En función de la hora de salida de nuestros vuelos seremos trasladados al aeropuerto para comenzar nuestro viaje de regreso a España.